Los integrantes del espacio querellante Justicia YA! venimos a repudiar enérgicamente la decisión del Tribunal Oral Federal Nº 5, que atiende el desarrollo de la causa Esma, de permitir la salida transitoria al encartado Juan Antonio Azic para asistir a una boda.
Este probado genocida-torturador, apropiador además de dos niñas nacidas en cautiverio y cuyos padres permanecen desaparecidos, tuvo el atrevimiento y cinismo de solicitar al tribunal permiso para asistir al casamiento de una de sus victimas en calidad de padrino de bodas.
Algunos de los integrantes de este colectivo, sobrevivientes de la Esma, pudieron ver en el año 1980 como este asesino se apropiaba con total impunidad de la beba recién nacida del matrimonio Dameri-Ruiz al momento mismo del parto. Del casamiento de ella, hoy joven de 30 años de edad, se trata este atropello a la razón, esta falta absoluta de respeto.
Recordemos que con anterioridad Azic se había apropiado de la joven Victoria Donda allá por el año 1977 y que, luego hace pocos años atrás, cuando fue descubierto y estando a punto de ser extraditado a España, intentó suicidarse con un disparo en la cara. A consecuencia de ello estuvo Azic internado en una clínica psiquiátrica durante muchos años por decisión de este mismo tribunal que consideró que la salud mental de ese individuo podía hacer correr peligro sobre su vida y la de los demás.
Las razones que esgrime el tribunal son por demás descabelladas e insultantes, y como ejemplo mencionaremos solo la que le atribuye a Azic la “paternidad” sobre la víctima, y que en razón de ello debe éste presentarse en calidad de “padrino” de la boda.
Algunos de sus cómplices están siendo juzgados junto a el, esperemos que el tribunal no decida permitirles asistir al casamiento en calidad de invitados.
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