Buscar en el blog

martes, 28 de diciembre de 2010

La presidenta no se confunde


La presidenta de los Argentinos no se confunde a la hora de hacer declaraciones. Las tiene bien pensadas.
Fijense que bien que salió en una conferencia con la Federación Argentina de Entidades Empresariales del Transporte de Carga (FADEEAC), junto con Moyano y Pedraza, responsables de liquidar los trenes de nuestro país.
¿Que dijo ahora? Casi nada, solamente le hechó la culpa de las ART y la industria del juicio a los abogados. O sea, toda esa década menemista, que ya suma como 15 largos años en este terreno, con muchas inconstitucionalidades a cuesta, es culpa de los "caranchos", abogados obviamente.
Sin dejar de mencionar que en este rubro hay algunos de estos (particularmente los que trabajan con la policía), realmente responsabilizar a los abogados por los males de la Ley de Riesgos del Trabajo, que es una burla a la reparación civil (lo laboral es menor a lo civil, principio general para esta gente) es, cuanto menos, una canallada.
Cristina no se confunde. Nos quiere confundir a nosotros. Pero no lo consigue.
Vean estas notas (particularmente la primera) y comentemos para armar algo mejor:

1 comentario:

Anónimo dijo...

Excelentes las críticas de la primera nota.

En efecto, caranchos hay y no me atrevo a decir que son pocos, lamentablemente.

Sin embargo, existen profesionales -e incluso estudiantes de abogacía- que están dispuestos a poner su matrícula al servicio de las luchas e intereses populares, como los compañeros/as que participan activamente en la defensa de tomas de tierra, de fábricas recuperadas, contra los casos de gatillo fácil, etc.

Lo que hace CFK es correr el eje: el problema hay que focalizarlo no en los abogados sino en el lucro y rédito que obtienen las empresas por no respetar (o hacerlo mínima y deficientemente) las normas de seguridad de las fábricas. Especulan con la salud y vida de los/as obreros/as. Piensan: "¿Qué me va a salir más barato? ¿Cumplir con las medidas para que los trabajadores no se "accidenten" (¿?) o pagarles la indemnización pedorra que prevé la LRT?" Por supuesto, la indemnización... si se la pagan!!! Porque como existe un terrible negociado entre las comisiones médicas y las ART, nadie paga nada...

En fin, Cristina: no somos todos caranchos. No sé cuál habrá sido tu caso y el de tu fallecido marido. Desconozco. De lo único que puedo dar fé es que hoy te la pasás hablando de los DDHH y despilfarrás puteadas contra la dictadura. Pero durante esa época oscura de nuestra historia, te la pasaste "juntando platita" en tu estudio...

¡Por abogados/as al servicio del pueblo!